Las dificultades de las familias argentinas para cumplir con el pago de sus deudas siguen profundizándose. Según datos oficiales del Banco Central de la República Argentina (BCRA), la mora en los créditos a los hogares volvió a subir en octubre y ya alcanza al 7,8% del total del saldo prestado, un nivel que no se observaba desde hace 15 años.
La información surge del Informe sobre Bancos difundido este viernes por el BCRA, con cifras actualizadas hasta fines de octubre, un período marcado por fuertes subas de tasas de interés, tensiones cambiarias y un clima de incertidumbre previo al proceso electoral, factores que impactaron de lleno en la capacidad de pago de los hogares.
Fuerte deterioro en comparación con el año pasado
El deterioro del crédito familiar es notorio al comparar con períodos anteriores. Un año atrás, la irregularidad en el repago de los préstamos a familias apenas superaba el 2%, lo que pone de manifiesto la magnitud del salto registrado en los últimos meses.
En contraste, el nivel de mora de las empresas se mantiene considerablemente más bajo: en octubre fue de 1,9%, reflejando una mayor capacidad de adaptación financiera del sector corporativo frente al encarecimiento del crédito.
En términos generales, la irregularidad del crédito al sector privado se ubicó en 4,5%, lo que implicó un aumento de 0,4 puntos porcentuales respecto de septiembre, confirmando una tendencia creciente en los atrasos de pago.
Deuda récord y tasas que multiplican la inflación
El aumento de la mora se produce en un contexto de endeudamiento elevado y condiciones financieras muy exigentes. Un relevamiento reciente del Banco Central indicó que la deuda promedio por cliente asciende a $5,6 millones, considerando tanto créditos del sistema financiero tradicional como obligaciones contraídas en el circuito alternativo.
Ese nivel de deuda se combina con tasas de interés que, como piso, superan en cuatro veces a la inflación, lo que agrava la situación de los hogares y eleva el riesgo de incumplimiento, especialmente en préstamos personales y consumos financiados con tarjeta.
Más de 6 millones de personas endeudadas dentro y fuera del sistema bancario
Otro dato relevante del informe oficial muestra que 6,2 millones de personas mantienen deudas simultáneamente en bancos y en el sistema «extra bancario», de acuerdo con la información disponible hasta julio, último dato publicado para ese segmento.
En esos casos, los pasivos promedio alcanzan $4,4 millones por cliente dentro del sistema bancario, a los que se suman otros $1,2 millones correspondientes a deudas con entidades no bancarias, como financieras, billeteras y proveedores de crédito alternativo.
El stock total de crédito otorgado por estas entidades no bancarias asciende a $11 billones, canalizados principalmente a través de tarjetas de crédito y préstamos personales.
Explosión del crédito al consumo
Durante el último año, la demanda de financiamiento mostró un crecimiento muy acelerado. Según el BCRA, los préstamos personales aumentaron 144% en términos reales, mientras que el uso de tarjetas de crédito creció 53%, una dinámica que explica en parte el deterioro posterior en los indicadores de mora.
El endeudamiento promedio de $5,6 millones por persona, registrado en julio, representó un incremento interanual del 75%. Doce meses antes, la deuda media por cliente se ubicaba en torno a $3,2 millones.
El informe del Banco Central también dejó otro dato relevante para el sistema financiero: por segundo mes consecutivo, los bancos privados registraron pérdidas, un fenómeno inédito en las últimas dos décadas.
En septiembre, el resultado negativo fue equivalente al 2% de los activos, mientras que en octubre el quebranto se redujo, aunque siguió siendo significativo, cercano al 0,5%. El escenario refleja el impacto de la volatilidad financiera, la suba de tasas y el deterioro en la calidad del crédito sobre la rentabilidad del sistema.
